LA FEDERACIÓN ARGENTINA LGBT IMPUGNÓ LA NOMINACIÓN DE GRACIELA OCAÑA COMO DEFENSORA DEL PUEBLO DE LA NACIÓN

Por sus expresiones discriminatorias respecto de la donación de sangre desde la comunidad LGBT, por propuestas que restringen los derechos de las mujeres, por su poca autonomía ante los poderes nacionales, provinciales y locales, por la falta de respuesta ante el faltante de medicamentos para las personas que viven con VIH cuando estuvo al frente del Ministerio de Salud, desde la Federación Argentina LGBT impugnamos la nominación de la Lic. Graciela Ocaña como candidata a Defensora del Pueblo de la Nación.

Hace dos años pudimos dar un paso hacia la igualdad cuando se puso fin a la larga historia de discriminación hacia la comunidad LGBT que impedía a gays y personas trans donar sangre. Ocaña se manifestó en contra de ello, no quiso avanzar hacia un sistema nacional de sangre seguro, solidario e inclusivo. Cuando el Ministerio de Salud de Argentina puso fin a la restricción para donar sangre en septiembre de 2015, la orientación sexual de una persona dejó de ser considerado un riesgo.

Expresó la Presidenta de la FALGBT, Marcela Romero: “La Lic. Ocaña tuvo argumentos discriminatorios. Con sus expresiones siguió excluyéndonos en forma arbitraria ante un acto de solidaridad como es el donar sangre. También recordamos su propuesta estigmatizante que limitaba los derechos de las mujeres y las pretendía hacer responsables del acoso  que recibían. Propuso la creación de un vagón especial en el subterráneo como una supuesta solución para evitar esas situaciones de acoso o de abuso sexual. Cuando estuvo al frente del Ministerio de Salud de la Nación, su falta de compromiso fue alarmante al no dar respuestas ante un importante faltante de medicamentos para el tratamiento para las personas que conviven con VIH. Ocaña no transmitió ningún tipo de información de lo que sucedía y con eso generó incertidumbre en quienes estaban en tratamiento y en sus familiares. Desde la Federación Argentina LGBT impugnamos su nominación porque quien ocupe el puesto de la Defensoría del Pueblo de la Nación debe ser independiente, debe estar comprometidx con los intereses de la ciudadanía y debe bregar por la igualdad de derechos de todas las personas”.